Tecnociencia.
La inmortalidad
El personaje de la foto Krang, uno de los villanos de las "Tortugas Ninjas" (1987), que como vemos es un cerebro despojado de cuerpo, con una inteligencia sin igual, con boca, ojos y tentáculos.
"(...) continuar existiendo como una mente sin cerebro, que antes soportaba la vida mental..."
¿el final del Krang y el comienzo de la inmortalidad?
En este segundo capítulo, continúa empleando el término obsoleto, pero ahora, explayándose más en relación al organismo. Si nuestra estructura corporal es obsoleta, ¿desaparecemos o nos volvemos inmortales?
Para continuar comprendiendo en el libro se habla de dos vertientes, que bien son consecuentes. Por un lado, la tradición Prometeica, que con espíritu altruista, brega por el bien común de la humanidad, sin quebrar JAMÁS las fronteras de la naturaleza humana.
Por el otro lado, nos encontramos con la tradición faustica, con su impulso por la apropiación ilimitada de la naturaleza (humana y no humana) para ejercer previsión y control.
En la transición hacia la tradición faustica, el sueño de la inmortalidad, pareciera volverse una posibilidad. El control total sobre la vida (en el amplio sentido de la palabra) ya supera las antiguas barreras biológicas. Hoy por hoy, se puede decidir realizar una amplia y bastísima gama de tratamientos: para retrasar el envejecimiento, para embellecer, para reparar, para contrarrestar, para rejuvenecer, para implantar, entre otros. E incluso hoy se puede decidir el mantenimiento o no de la vida de un ser querido, ya que las nuevas tecnologías así nos los permiten.
Con respecto a prolongar la existencia, ya lejos de una estructura corporal determinada, P. Sibilia, hace referencia a la inteligencia artificial, que consiste en la aspiración de extirpar la mente del cerebro humano y transferirlo a una computadora.
Parece que la utopía de Krang, si desapareció...
Espacio y temporalidad
En esta escena de la película "Harry Potter y el Prisionero de Azkaban", sus protagonistas están envueltos por el reloj giratiempo, que permite volver el tiempo atrás, y es lo que le permite a la protagonista femenina concurrir varias clases a la vez. Pero ella utiliza una frase muy elocuente "NO SE PUEDE ESTAR EN DOS LUGARES A LA VEZ..."
La superación del espacio y el tiempo es otra de las virtudes, con las que contamos en el imperativo de la conexión. La teleinformática, nos permite superar, sortear los límites espaciales, e incluso, anular las distancias geográficas. Hoy es posible estar no en dos, sino en múltiples espacios a la vez. Mientras cursamos una materia vía twitter, podemos programar un lavarropas, tomar mates con papá y hablar por chat con un amigo que vive en Israel. Cuantas cosas no?
Parece que estamos en todos lados, pero a la vez no nos sentimos en ninguno...
A la vez que todas las conexiones que realizamos en los espacios virtuales, sigue sumando datos e información a la World Wide Web. Entonces Sibilia, plantea algo que resulta tan lógico, como intimidante: "... el hombre se vuelve tanto más sospechoso, cuanto más difícil sea encontrarlo..."
Si bien todavía no esta al alcance de todos (todavía) volver el tiempo atrás, si podemos estar en dos lugares a la vez... O al menos sentirlo así...